En la vida actual, la mayoría de las personas optamos por mandar mensajes con emojis. Probablemente has pasado por alto este dato durante mucho tiempo, pero te sorprenderá saber que dice mucho sobre ti y sobre tu personalidad.
Quizá parezca algo insignificante pero no lo es. Obtener este signo evolutivo conocido como lenguaje por empatía nos ha costado muchos años.
Se trata el lenguaje con el que nos comunicamos cuando estamos cara a cara. Nos ayuda a saber si alguien está feliz, enfadado o enamorado. Al usar los emojis traspasamos esos sentimientos a la comunicación digital y conseguimos conversar con otro de forma directa e intuitiva.
Además de facilitar la comunicación digital, están muy relacionados con la personalidad de cada uno.
Linda Kaye, una psicóloga de Edge Hill University en Reino Unido cuenta que solemos usar los emojis como gestos, como una forma de mejorar las expresiones emocionales. Intentamos imitar la forma en que gesticulamos con ellos.
Además, al igual que con los gestos reales, con los emojis existen discrepancias respecto al cómo, cuándo y por qué los usamos.
Otro estudio publicado en Trends in Cognitive Sciences reveló que las personas que los usan constantemente son más amables que las que no lo hacen.
Sophie Scott, científica de Royal Institution, comenta que, aunque las redes sociales pueden separar a los individuos ya que se basan en relaciones virtuales, los emojis nos recuerdan la necesidad humana de una comunicación afectiva.
Cuando relacionamos la personalidad con los emojis, encontramos tres grandes perfiles:
1- Usar los de gestos implica la necesidad de demostrar emociones.
2- Usar los gestos positivos reflejan una personalidad extrovertida.
3- Usar solo emojis de objetos es característico de una persona formal y con miedo a expresarse.
Quizás hay gente que piensa que los emojis son infantiles y que solo los usan los adolescentes, pero no es así. Sirven para expresar nuestras emociones y por lo tanto definen nuestra personalidad. Te permiten expresar lo que sientes sin necesidad de usar ninguna palabra.
