¿Te encantaría tener un lavadero ordenado y práctico sin gastar un dineral? ¡Estás en el lugar correcto! En este artículo te mostramos cómo dar un cambio de 180 grados a esa zona de la casa que a veces pasamos por alto, y de paso, te dejamos un montón de ideas de bricolaje para ahorrar espacio y reorganizar otras partes de tu hogar.
Verás que no necesitas un gran presupuesto para dejar tu lavadero (o tu garaje, baño o cualquier rincón de la casa) tan bonito como funcional. Desde cestas hasta estantes de pared, pasando por pintura de pizarra y soluciones creativas, te vas a sorprender de todo lo que puedes conseguir con ingenio y un poco de maña. ¿Te animas? ¡Vamos a descubrir cada idea paso a paso!
1. Ahorra espacio apilando la lavadora y la secadora
Uno de los trucos más sencillos y eficaces para un lavadero pequeño es colocar la lavadora y la secadora apiladas. Esto te permitirá liberar un buen número de metros cuadrados, esenciales si tu zona de lavado es reducida. Además, al tener los dos electrodomésticos juntos, puedes ahorrar tiempo en el proceso de carga y descarga.
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2. Crea una bonita zona de lavandería en el garaje
Si no te apetece apilar la lavadora y la secadora o simplemente no te encaja por las dimensiones de tus electrodomésticos, siempre puedes aprovechar el espacio libre del garaje. Montar un pequeño rincón de lavado en esta zona puede resultar muy práctico, ya que a menudo el garaje suele contar con metros desaprovechados.
Además, puedes combinarlo con estantes, armarios o módulos de almacenamiento para tener a mano los detergentes, los suavizantes o cualquier producto de limpieza. De esta forma, tu garaje se convertirá en el aliado perfecto para mantener tu casa impecable sin renunciar al orden.
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3. Utiliza cestas para organizar y decorar
Las cestas son un recurso fantástico para organizar no solo la ropa sucia, sino también la ropa limpia antes de planchar o doblar. Si además eliges cestas bonitas y amplias, tendrás un toque decorativo adicional que hará más agradable tu lavadero.
Un truco extra es etiquetarlas para separar la ropa clara de la oscura, la ropa de cama de la de diario, o incluso para guardar detergentes y utensilios de limpieza. ¡Tendrás todo al alcance de la mano y con un toque elegante!
Home With Baxter
4. Aprovecha la pintura de pizarra
¿Te gusta llevar un control o tienes una mente muy creativa? Entonces, pinta una pared con pintura de pizarra. Además de ser un elemento decorativo genial, podrás escribir notas, recordatorios de lavado o incluso hacer dibujos que den un toque divertido al espacio.
Si añades una pequeña estantería en la misma pared, puedes etiquetar cada balda directamente en la pizarra, indicando lo que contiene cada una. Así, cualquiera que pase por ahí sabrá dónde debe colocar las cosas, y evitarás confusiones en casa.
My Sweet Savannah
5. Utiliza cajoneras pequeñas
En ocasiones, no tenemos espacio para grandes estanterías o armarios. Aquí es donde las cajoneras pequeñas se convierten en tu gran solución. Procura medir bien el hueco disponible para encontrar un mueble que se ajuste a la perfección y te permita aprovechar cada centímetro.
Puedes guardar los productos de limpieza, herramientas o incluso aquellas pequeñas cosas que nunca sabes dónde colocar. Además, las cajoneras son fáciles de mover, por si en algún momento quieres reorganizar tu espacio.
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6. Coloca estantes de pared en el aseo
El aseo de casa suele ser pequeño y, a veces, no cabe ni un mueble. Pero eso no significa que tengas que renunciar al orden. Instalar unas baldas en la pared, justo encima del retrete, es una forma fantástica de ganar espacio de almacenamiento.
Guarda en esas baldas el papel higiénico, productos de aseo o incluso un pequeño kit de toallas de mano. No solo te será práctico, también quedará muy bonito si eliges estantes con un estilo que combine con los azulejos o la decoración de tu baño.
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7. Instala bandejas deslizantes
Si eres manitas y te gusta el bricolaje, anímate a poner bandejas deslizantes en los armarios. Son geniales para almacenar objetos que prefieras mantener fuera de la vista o que quieras tener perfectamente ordenados.
Aunque el proyecto pueda requerir un poco más de tiempo o destreza, el resultado merece la pena. Una vez instaladas, te olvidarás de tener que rebuscar en el fondo del mueble y podrás extraer fácilmente cada bandeja para coger lo que necesites.
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8. Almacenamiento inclinado con cestas
¿Qué tal combinar la idea de las cestas con unas baldas inclinadas? Esta disposición te facilitará el acceso a las cestas, especialmente si están en la parte superior de tu lavadero. Así, no tendrás que hacer malabares para llegar a lo que necesites.
Además, al inclinar las baldas, las cestas se mantienen en un ángulo perfecto para ver su contenido y coger cualquier prenda u objeto. Una manera sencilla de lograr que la rutina de lavado sea más cómoda y eficiente.
Hold Your Hats
9. Utiliza botes y frascos de cristal
Si guardas pequeñas herramientas de bricolaje como tornillos, tuercas, destornilladores o incluso productos de aseo y maquillaje en el baño, esta idea te vendrá de perlas. Fija unos botes de cristal o plástico a una tabla de madera y cuélgala en la pared. ¡Crearás tu propio sistema de almacenamiento vertical!
Este truco no solo te ayuda a tenerlo todo localizado, sino que también le da un toque muy original a la decoración. Puedes jugar con diferentes tamaños de botes para separar mejor el contenido y que sea más sencillo de encontrar.
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10. Coloca una banda magnética
Otra manera estupenda de guardar objetos metálicos como pinzas, tijeras o pequeñas herramientas es instalar una banda magnética o imantada en la pared o dentro de un armario. De esta forma, podrás mantenerlos siempre localizados sin ocupar espacio en cajones.
Además, la banda magnética es muy versátil, ya que sirve tanto para la cocina (con cuchillos y utensilios) como para el baño, el taller o cualquier rincón de tu casa. ¡La clave está en encontrar ese lugar donde te resulte más práctica!
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El orden es posible... ¡y económico!
Como ves, hay muchísimas formas de ahorrar espacio y embellecer tu hogar, ya sea en el lavadero, el garaje o el baño. Desde sencillos trucos, como apilar la lavadora y la secadora, hasta otros más elaborados, como instalar bandejas deslizantes o pintar una pared con pizarra, todas estas ideas son perfectamente adaptables a tus necesidades.
Lo mejor es que no tienes que hacer una gran inversión de dinero: un poco de ingenio y algo de bricolaje bastan para conseguir un cambio espectacular. Y lo más importante: no hay nada como disfrutar de un espacio ordenado que haga tu día a día más fácil y agradable.
¿Qué opinas de estos consejos? ¿Te animas a ponerlos en práctica? ¡Cuéntanos tus trucos o sugerencias!
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